Si la idea de utilizar Linux te pone nervioso, lo más probable es que hayas sido víctima de uno o más de los muchos mitos que con frecuencia son difundidos por proveedores de la competencia, como Microsoft. Después de todo, cada usuario de Linux significa una menor venta para dichas empresas, por lo que tienen una motivación poderosa para difundir tales mentiras.
Echemos un vistazo a algunos de los mitos más comunes y disipemos las dudas de una vez por todas.
- Mito: “Es difícil de instalar”
Hoy en día, instalar Linux es más fácil que instalar Windows. Por supuesto, la mayoría de la gente no instala Windows, ya que viene preinstalado en el hardware, y eso es una opción con Linux también, si es que estás en busqueda de una nueva máquina.
Lo mejor que puedes hacer primero es probar la distribución que mas te llame la atencion por medio de un Live CD o USB Live. Luego, una vez que te decidas, puedes instalar en forma de arranque dual, de modo que tanto Linux como Windows esten disponibles para tu uso, o puedes instalar Linux en vez de Windows.
De cualquier manera, la instalación se ha vuelto extremadamente simple a través de los años, sobre todo en distribuciones como Ubuntu, Fedora, Linux Mint y openSUSE. La mayoría incluye un asistente paso a paso y herramientas gráficas muy fáciles de entender. Una instalación completa tardará no más de 30 minutos, incluyendo aplicaciones basicas.
- Mito: “Es sólo para expertos”
Que Linux sea más difícil de usar que Windows y Mac es probablemente una de los mitos más perdurables e injustificados que existen en la actualidad. Sin duda, que solía ser verdad – digamos, hace 10 años. Hoy, sin embargo, la inclusión de atractivas interfaces gráficas y otras mejoras en muchas distribuciones han hecho posible que incluso los niños de escuela primaria puedan utilizar Linux fácilmente.
Ahora, el uso en servidor es una historia diferente – al igual que bajo Windows, por ejemplo. Pero en el escritorio, si estás acostumbrado a la interfaz gráfica de usuario de Windows o Mac OS X, no deberías tener problemas para acostumbrarte a Linux. Es así de simple.
- Mito: “Es gratuito, así que debe ser pirata”
A pesar del uso cada vez mayor de software de código libre y abierto en los gobiernos y otras organizaciones, algunas personas todavía creen que cualquier software que sea libre tiene que ser una copia ilegal. Afortunadamente, eso es completamente falso. La noción de “tomar” el software de Internet y luego “manipularlo” para sus propios fines puede atacar a los temores de los litigios en los corazones de quienes no están familiarizados con el concepto, pero no te preocupes! El software libre y de código abierto está diseñado para ser libre en costes, así como abierto a la modificación y mejora, así es como funciona.
- “No hay soporte”
A los vendedores de software propietario les encanta asustar a los usuarios “Dibujando al usuario de Linux solo en medio del mar, sin nadie alrededor a quien pedir ayuda”. Una vez más, completamente falso!
En primer lugar, cada distribución de Linux tiene una comunidad en línea con excelentes foros para conseguir ayuda. También hay foros dedicados a las pequeñas empresas y para los nuevos usuarios con necesidad de explicación adicional. Para aquellos que desean estar aún más seguros, versiones comerciales de Linux como Red Hat Enterprise Linux y SUSE Linux Enterprise Desktop vienen con el soporte del fabricante.
- Mito: “No es compatible”
Hay muy pocos casos de hardware y software que no se pueden utilizar con Linux. Una de las muchas ventajas del sistema operativo, es que no está diseñado para consumir recursos, por lo que no requiere la última generación de hardware. La mayoría de los periféricos son compatibles, en particular en las distribuciones como Ubuntu.
En cuanto a aplicaciones, también es raro encontrar un problema. Si necesitas alguna aplicacion que se puede ejecutar sólo en Windows, existen paquetes como Wine y CrossOver Linux para esto. También hay un sin número de alternativas comparables y Linux-friendly, que pueden ser fácilmente instaladas, incluyendo todos los paquetes ofimáticos básicos.
- Mito: “Es menos seguro”
De todos los mitos perpetuados sobre Linux, yo diría que este es el que tiene el menor mérito. Realmente es todo lo contrario: Linux es muchisimo más seguro que Windows o Mac, como lo han confirmado incontables investigadores de seguridad. En pocas palabras, la seguridad en Linux se deriva de la forma en que se asignan privilegios, el hecho de que está abierto al escrutinio de innumerables desarrolladores del mundo entero, y la diversidad de las distribuciones en uso.
Alguna vez te preguntaste por qué nunca has oído hablar del equivalente para Linux de Microsoft “Patch Tuesday”? Eso es porque no existe, ya que no es necesario, ni es el software antivirus. Extraño pero cierto.
- Mito: “No es confiable”
Si estás utilizando Mac o Windows, no hace falta decir que estás íntimamente familiarizado con los termino “se me colgó la compu”. Parte de eso es debido a la vulnerabilidad de esos sistemas con los programas maliciosos, pero parte también es simplemente inherente en el software. Eso es una gran razón por la que Linux se utiliza tan fuertemente en los servidores – casi nunca se cae.
¿Linux es perfecto? Por supuesto que no; ningún sistema operativo es. Tampoco es, necesariamente, la mejor opción para cada quien, pero no dejes que los mitos te detenga.